Kingdom of the night
EMI
1989
¿Nunca les ha pasado que por quien sabe qué razón desconocida un disco les pasa desapercibido a pesar de ser excelente? Bueno, pues eso fue lo que me pasó a mí con el material que voy a reseñar ahora. El conocerlo se lo debo a un buen amigo al menos 10 años menor que desde luego, no lo escuchó cuando salió editado y a quien por cierto, no le he preguntado como lo conoció. A veces me digo a mi mismo que estaba dormido o vivía en otro mundo, porque ni de nombre les conocía. Desde luego y en forma autoindulgente, me respondo que no es posible conocer todo, absolutamente todo lo que sale editado.
Bueno, estamos ante la presencia de una joya olvidada de los ochentas; esta agrupación Alemana, formada en 1988 y actualmente activa, supo muy bien como dotar a este álbum con rolas pegajosas, un tanto comerciales, pero sin caer en extremos ridículos o bochornosos. Su estilo está al límite entre el heavy metal y el hard rock. La producción de esta obra es bastante buena, todos los instrumentos pueden apreciarse con claridad. La portada es bastante simple, ya que tan solo muestra el logo del grupo sobre una pared fracturada que para nada presagia lo bueno que es el disco. De entrada nos recetan con una rola lenta pero tan pegajosa que difícilmente te la puedes quitar de la cabeza, hablo de “Living in a world”, para continuar inmediatamente con la pieza que da título al disco, y no nos podía defraudar: la rola avanza a buen paso y tal como hiciera la pieza anterior, es difícil de olvidar y cuando acabe el disco, te la vas a pasar cantando o silbando. Así podemos enumerar rolas como “Never say never”, “Young souls”, “Love is like an ocean”, “Just one night” y “Kings made of steel”, todas con sus características propias, pero en la línea de lo ya mencionado: buen ritmo, pegajosas y difíciles de olvidar.
En pocas palabras, una buena y refrescante adquisición para tu colección.
Les dejo “Young souls”, para que la descarguen. Es una canción que habla de que la juventud es un estado mental y no corporal. Espero que la disfruten.
Bueno, estamos ante la presencia de una joya olvidada de los ochentas; esta agrupación Alemana, formada en 1988 y actualmente activa, supo muy bien como dotar a este álbum con rolas pegajosas, un tanto comerciales, pero sin caer en extremos ridículos o bochornosos. Su estilo está al límite entre el heavy metal y el hard rock. La producción de esta obra es bastante buena, todos los instrumentos pueden apreciarse con claridad. La portada es bastante simple, ya que tan solo muestra el logo del grupo sobre una pared fracturada que para nada presagia lo bueno que es el disco. De entrada nos recetan con una rola lenta pero tan pegajosa que difícilmente te la puedes quitar de la cabeza, hablo de “Living in a world”, para continuar inmediatamente con la pieza que da título al disco, y no nos podía defraudar: la rola avanza a buen paso y tal como hiciera la pieza anterior, es difícil de olvidar y cuando acabe el disco, te la vas a pasar cantando o silbando. Así podemos enumerar rolas como “Never say never”, “Young souls”, “Love is like an ocean”, “Just one night” y “Kings made of steel”, todas con sus características propias, pero en la línea de lo ya mencionado: buen ritmo, pegajosas y difíciles de olvidar.
En pocas palabras, una buena y refrescante adquisición para tu colección.
Les dejo “Young souls”, para que la descarguen. Es una canción que habla de que la juventud es un estado mental y no corporal. Espero que la disfruten.
1 comentario:
así mero, gran banda. Su siguiente disco es muy muy bueno también.
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