SABATON EN LA CIUDAD DE MÉXICO. RESEÑA

Sabaton 

Circo volador 

Ciudad de México 

Prácticamente desde que pusieron a la venta los boletos para el concierto, yo me hice con el mío, pensando en que pudieran acabarse. Después de ello, no volví a saber como iban las ventas, si no hasta el mismo viernes por la mañana cuando al ir llegando a mi trabajo me encontré a un amigo que me dijo que no se habían vendido mas de 500 boletos y que por lo tanto el concierto se iba a ser en el lobby del circo volador, o sea, en la parte pequeña del recinto, pensé que tal vez no era cierto, pero grande fue mi sorpresa al llegar al lugar un poco antes de las 8 de la noche y constatar que, efectivamente, había poca gente en el recinto, sinceramente yo esperaba unas 1500 o 2000 personas, pero no, SABATON sigue siendo una banda under acá en México, a pesar del gran éxito en Europa. 

En fin, poca gente, pequeño lugar, así que se podía verlos de más cerca. Apenas 5 minutos después de las 9 de la noche, las luces se apagaron y entró la banda con todo su poder, y presentando a 3 nuevos integrantes, el vocalista, Joakim Brodén, vestido con su típica indumentaria, semejante a una armadura ligera. Si mal no recuerdo abrieron con “Ghost división”, para seguirse con puras piezas bien conocidas por los fans como: “Uprising”, “40:1”, “Cliffs of Gallipoli”, “The art of war” entre varias otras. . El lugar estaba sumamente caliente y por ello se vio sudar copiosamente al vocalista y en realidad a toda la banda. El vocalista demostró ser un gran frontman, que hacía constante contacto con el público y lo animaba a cantar, alzar los puños, además de lanzar pequeños discursos entre canción y canción, enfatizando que era un público muy loco y ruidoso y que eran los mejores que le habían tocado en la gira (jajaja, seguro eso lo dice en todas partes). En fin que la banda tocó por ahí un par de temas de su nueva producción, que básicamente están en el contexto que ya han venido manejando: medio tiempo, pesado, elegante y rítmico. Por supuesto no podían faltar rolas como: “Attero dominatus”, y “Coat of arms”. La banda se retiró por un breve lapso para regresar y tocar tres rolas más: “Primo vistoria”, “Panzer battalion” e increíblemente, “Metal crew”, la cual prácticamente nunca tocan completa si no como un medley, así que la gente estaba extasiada, aunada al hecho de que tanto el vocalista como el baterista salieron al escenario sin ropa en la parte superior del cuerpo, para delicia de las damas presentes. En pocas palabras, un excelente show, que no tuvo falla de sonido, que estuvo bien ecualizado y con una banda entregada y poderosa, que tiene muy posiblemente, el futuro del metal en sus manos.